MICROORGANISMOS: PRESENTE Y FUTURO EN AGRICULTURA
Estamos en una época en que la fertilización tradicional de los cultivos está cambiando, debemos adoptar un nuevo enfoque de la fertilización y abandonar la estrategia clásica de reponer cada año los nutrientes a las parcelas, aplicando una visión más dinámica y global, teniendo en cuenta que el suelo es un espacio vivo, en el que interactúan microorganismos y diversos materiales, que son los verdaderos protagonistas de la fertilización.
Los objetivos agrícolas de la Unión Europea para el año 2030 es reducir el 50 % en el uso de agroquímicos, el 20 % en el empleo de fertilizantes y una limitación del 50 % en las pérdidas de nutrientes, junto con un incremento de la superficie ecológica hasta alcanzar una ocupación del 25 % de las tierras agrícolas.
La agricultura moderna necesita revisar sus prácticas mediante la integración de enfoques novedosos para producir alimentos de una manera sostenible. El uso de bioestimulantes, pueden reducir la dependencia de insumos químicos, en particular fertilizantes sintéticos, así como asegurar la estabilidad de la productividad en condiciones ambientales y edáficas desfavorables.
Y dentro de esta denominación encontramos los microorganismos, que son imprescindibles para mantener la fertilidad del suelo, para desarrollar cultivos sanos y vigorosos… y sin saberlo, además el hombre viene utilizándolos desde hace milenios para beneficio propio, en sanidad y en la elaboración de alimentos. Desde hace pocos años, los microorganismos destinados al uso en agricultura están ganando importancia, dado que se han comprobado los resultados positivos de su aplicación como alternativa al uso de otro tipo de fertilizantes.
Pero, ¿Qué entendemos por microorganismos cuando son aplicados en agricultura?
Un microorganismo, es un organismo con una organización biológica elemental. Cuando nos referimos a ellos en el suelo agrícola, estamos usando el nombre genérico para referirnos a miles de:
- Bacterias
- Hongos
- Levaduras
- Cianobacterias
- MIcroalgas
- Protozoos
Todos ellos habitan en cada gramo de tierra rodeando a las plantas, las bacterias, los hongos filamentosos y las levaduras son los más estudiados y utilizados en técnicas agrarias para la mejora del suelo agrícola.
Los microorganismos son tan imprescindibles para la vida y fertilidad que, aquellos suelos que no poseen una flora microbiana se consideran pobres y desequilibrados y necesitarán, por parte del agricultor, un aporte continuo de fertilización de síntesis, entre otras acciones.
Además, también nos podemos hacer la siguiente pregunta, ¿Qué tipo de productos con microorganismos encontramos en la agricultura? Y la respuesta es amplia, puesto que en base a la función que realizan, reciben diversos nombres:
- Productos probióticos: con bacterias que ayudan al desarrollo y fortaleza de la planta, aumentando la producción de fitohormonas naturales e inducen las defensas ante plagas y enfermedades.
- Productos probióticos biofertilizantes: fijadores de nitrógeno, solubilización de fósforo y potasio e incentivación de sideróforos de hierro.
- Productos probióticos bioestimulantes: generan fitohormonas de ácido indolacético y de ACC desaminasa.
- Productos prebióticos: con bacterias que incentivan el crecimiento de otros microorganismos beneficiosos.
- Productos simbióticos: con bacterias de uso probiótico y prebiótico.
- Productos biofertilizantes o bioestimulantes, aumentan el crecimiento y la producción del suelo, estimulan la actividad microbiana de suelos empobrecidos y aumentan la salud.
- Productos biofungicidas: con materias primas de microorganismos antagonistas.
- Productos de biocontrol: microorganismos no patógenos, generalmente pseudomonas, que favorecen el crecimiento de las plantas, incluso infectadas por hongos.
Una vez identificados, según sus funciones, debemos afirmar que Los microorganismos son muy importantes para la vida en el planeta, puesto que tienen hasta un Día Internacional, el 17 de septiembre, con el que se intenta concienciar del valor de los mismos. Nosotros, como seres humanos disponemos de ellos en diversas partes del cuerpo para garantizar el buen funcionamiento del mismo en diversas labores. Aunque es en nuestro tracto digestivo donde están más presentes: hay un kilo y medio de ellos.
Curiosamente, el “tracto digestivo” de la planta – la raíz- es también a través de la cual surge simbiosis de los microorganismos del suelo y la planta. Cuando esta flora trabaja adecuadamente, al igual que con los seres humanos, tenemos garantías de un buen crecimiento y desarrollo, de una correcta nutrición y de poseer armas para luchar contra enfermedades y plagas. Y, sí, al igual que en las personas, los hay buenos y malos, lo fundamental es rodearse del máximo posible de los buenos y mantener a raya a los malos. Este entorno que reúne raíz, suelo y microorganismos es la rizosfera.
Por último, vamos a intentar dar respuesta a las preguntas más generalizadas que nos encontramos cuando hablamos de este tipo de organismos.
En primer lugar y atendiendo a la fertilización, surge la duda si se puede fertilizar el suelo con microorganismos. Pues bien, la respuesta es que en realidad, NO. Es una confusión muy generalizada.
Cuando hablamos de biofertilización, lo que estamos haciendo es aumentar el número de microorganismos en tierras agotadas para acelerar los procesos microbianos. Y… ¿qué tienen que ver los procesos microbianos? Con ellos, la planta absorberá mejor los nutrientes y reducirá la energía para acceder a ellos, pero es importante señalar que los nutrientes tienen que estar ahí, ya que, lo que se consigue con ellos es una mejor y más rápida asimilación y, por ende, un menor desgaste de la planta. Es un poco como con el hierro y la vitamina C con las personas. La vitamina C consigue que asimilen mejor el hierro, pero si no hay hierro disponible, no hay nada que absorber.
Por esta razón, el uso de microorganismos para una mejor fertilización debe ir de la mano con un estudio adecuado de la tierra para saber si hay disponibilidad de nutrientes. Si no hay nada con qué nutrirse, la planta no puede ir a más.
Y por otro lado, surge la pregunta si ayudan los microorganismos a erradicar las plagas… Encontramos algunos que serán capaces de luchar contra diversas plagas y enfermedades ejerciendo de agentes de control biológico. ¿Cómo? Atacando lo indeseable y favoreciendo lo necesario, con lo que las cosechas y producciones aumentan y son más sanas. Y esto no es nuevo, es como siempre ha sucedido, los cultivos con microorganismos han sido capaces de vencer muchas de estas adversidades.
Si queremos que la lucha tenga lugar, debemos preocuparnos de que haya los suficientes microorganismos para llevarla a cabo.
Concluyendo, ¿Qué trabajo, función y beneficios tiene los microorganismos en el suelo?
Son muchos, pero algunos de los más relevantes son:
- Rehabilitan y recuperan suelos yermos: Rehacen la materia orgánica.
- Ayudan a mantener la fertilidad del suelo: Sin la flora microbiana son pobres y desequilibrados.
- Incrementan la formación y protección de las raícespara obtener cultivos fuertes y sanos.
- Afectan al ciclo biológico de muchos nutrientes: Por ejemplo, solubilizan fosfatos, fijan el nitrógeno atmosférico, o ponen a disposición los compuestos quelantes del hierro con sideróforos. Los que están en la rizoesfera de la planta, expulsan nutrientes para la planta, haciendo funciones de bioestimulación.
- Descomponen los restos orgánicos del suelo, humifican la materia orgánica y liberan los nutrientes haciéndolos asimilables por la planta.
- Aumentan la eficacia de la fotosíntesis y la clorofila de las plantas.
- Degradan contaminantes químicos y residuos peligrosos del suelo.
- Incrementan la captación del agua, haciéndolas resistentes a la sequía.
- Controlan plagas y enfermedades.
- Reducen el lixiviado(filtrado) de nutrientes.
- Ayudan a que los productos, más vigorosos, duren más en la planta sin recolectar.
- En suelos salinos o alcalinos ayuda a que la planta alcance los nutrientes.